I'm a believer

Pues bien, ya salió el maravilloso y siempre anhelado Halo 3. Anoche, a las 11:00 P.M. salí de mi casa y me dirigí al Castillo de Lomax para que juntos fuéramos testigos de la salida al mercado de este título.

El plan era dirigirnos al Blockbuster que está por mi casa y ya que me dieran el juego, marcharnos a la sucursal de la tienda que está en Metepec para poder estar en ambos sitios. ¡Oh sorpresa!, resulta que las empleadas del videoclub tenían instrucciones de no permitir la entrada de nadie hasta las 12:00, así que si planeabas lanzarte temprano para jugar Halo el 24 de septiembre, te tenían reservado un PELEISHON NO KEN ("te la pelas", pues) gigante con tu nombre.


-Lord Kevin Lomax que noblemente me acompañó-

Una vez que llegamos, Lomax y yo nos percatamos que ya había tres entusiastas gamers esperando afuera del establecimiento. Vaya, pensé que iba a ser el único loco que iría a la media noche, que bueno que no fue así porque platicamos muy fregón del juego.

Ya como a las 11:45 llegó un gamer que se identificó como "Gamercindo" y en ese momento, cuando ya estábamos todos los que llegamos antes de que abrieran la tienda, la charla se volvió aún más efusiva. Es verdad que hacía frío y que no éramos tantas personas pero el saber que hay muchos más gamers de Halo en mi ciudad (con clanes bien pros y toda la cosa) me alegró mucho. La plática fue sobre lo que esperábamos del juego y lo que habíamos visto hasta ese momento. La energía se sentía y las risas costaban trabajo.

Cuando por fin abrieron la puerta (alrededor de las 11:55) comenzó a llegar más gente y finalmente se congregó la cantidad de 10 órdenes de preventa listas para que en cuanto diéran las 12, las tres veces heróicas empleadas del Blockbuster nos entregaran nuestro producto.

Una vez que llegó el momento, todo pasó como entre un sueño. Las cajas negras de la versión legendaria cambiaban de mano y su contenido comenzaba a vislumbrarse en medio de miradas estupefactas. ¡Magia de la pura!!!! Creo que por más que escriba no describiré la alegría que me embargó.

Las fotos fueron tomadas, los gamercards intercambiados y las promesas de encontrarnos en Live forjadas. Y así, cada quién se separó para seguir su camino con rumbo a la batalla. A buscar adversarios que acepten el reto.


-La banda del Blockbuster-

Lomax y yo pasamos a la sucursal de Carranza para entrevistar a algunos orgullosos compradores y afortunadamente los encontramos. Unos chavos que alegremente aceptaron la entrevista comentaron que ni siquiera habían llegado a su casa, pues después de la escuela se pasaron directamente a disfrutar el ambiente previo a la salida del título. Más tarde, llegó una ambulancia para atender a un vago que estaba ahí. No supe qué le pasó pero parece que no fue nada grave, igual y se peleó con alguien.

Como dato curioso, las empleadas del Blockbuster de C.U. fueron tres veces heróicas debido a lo siguiente:
1.-Quedarse hasta esa hora, con el frío que hacía y sólo para esperar a unos inútiles que querían su jueguito fue notable.
2.- A diferencia del Blockbuster de Carranza, ellas eran sólo 2 (en Carranza eran 3 o 4 hombres) y no tenían un elemento de seguridad que las protegiera si surgía un Gamer iracundo. . . o un ataque de zombies.
3.- Una vez más, se diferenciaron de la sucursal de Carranza ellas no eran custodiadas por una patrulla que estuviera afuera de su establecimiento. ¡Notable!!


-Las heróicas empleadas-


-¡A salvar el mundo!-

Bueno, me retiro. Los balazos esperan.