martes, 28 de diciembre de 2010

. . . And back again

El tiempo no detiene su camino y deja sus huellas en el corazón y el cuerpo de todos nosotros. El 2010 ya ha llegado prácticamente a su fin y me siento felíz de poder escribir estas líneas y compartirlas con ustedes.

Nunca ha sido mi intención descuidar el blog ni abandonarlo ni nada. Lo considero mi espacio personal en donde he compartido mucho de mi y les agradezco a todos por leerlo.

Hoy quiero hablarles sobre una decisión que tomé hace tiempo y que aprovecho para hacerla oficial: Regreso a Toluca en marzo.

Vancouver ha sido una ciudad muy noble conmigo. Me ha compartido sus montañas nevadas, sus atardeceres junto al mar, su extensa gastronomía y su magnífica hospitalidad sin importar la etnia u origen. Después de prácticamente 2 años de vivir aquí no siento mas que gratitud con esta ciudad. Mi sueño de venir se cumplió y ha sido una experiencia increíble.

He aprendido mucho. Madurado a base de esfuerzos y sufrimientos que han dejado en mi una serie de lecciones que espero poder compartir con todos ya sea através de mi forma de ser o de enseñanzas a quienes les pueda servir.

Pero no importa lo bien que un viajero se haya preparado. Si uno se adentra en un desierto, el agua se acabará tarde o temprano.

Siempre me consideré una persona más bien solitaria. Alguien que no necesitaba de compañía para pasar un rato agradable o ser yo mismo, pero lo cierto es que mientras les escribo estas líneas, siento un inmenso vacío dentro de mi ser.

Cuando dejé México me fuí con los mejores deseos de todos cuanto me conocían en ese momento, pero hubo alguien que me entregó no sólo eso, sino todo su amor, comprensión y una paciencia que jamás voy a terminar de retribuír: Rox.

Mi niña jamás me abandonó. Siempre estuvo ahí cuando necesité de fuerzas, aliento o compañía, a pesar de las distancias y lo complicado que fue mantener nuestra relación durante todo este tiempo. Si bien es cierto que vivimos un par de duras pruebas, me lleno de orgullo al decír que las superamos y seguimos adelante en pos de lo que es el sueño mayor de ambos: Compartir nuestra vida.

Si anteriormente mencioné lo agradecido que estoy con Vancouver, ¡imagínense cuánto lo estoy con esa increíble mujer que ha caminado junto a mi durante todo este tiempo y se ha convertido en mi otra mitad! Es por ello que digo que hay un vacío dentro de mi. He pasado ya demasiado tiempo lejos de quien le da luz, amor y motivo a mi vida.

Si me conocen, aunque sea un poco, habrán notado lo cariñoso que soy, ya sea que los pueda abrazar o simplemente les demuestre con palabras lo mucho que los aprecio y/o admiro a cada uno de ustedes. Simplemente soy alguien que ha recibido mucho amor toda su vida y se ha acostumbrado a transmitirlo a la menor oportunidad y sin empacho real. Ahora imagínense, aunque sea por un segundo, lo mucho que me hace falta el expresar en persona a la mujer de mis sueños lo mucho que la amo. Todo el amor que yo siento y que me he quedado imposibilitado de transmitir por medio del internet.

Ahora, si a todo esto le agregamos todos los momentos en que mi princesa ha necesitado de mi apoyo y no se ha podido encontrar mas que con una pantalla del skype. . .

Ya es hora de volver.

Ninguno de los dos sabemos qué pasará el día de mañana, pero tampoco lo sabíamos cuando me vine para acá. Lo único con lo que hemos contado es con la seguridad de que el vínculo que compartimos es muy fuerte y nos permitirá triunfar en esta aventura que estamos por emprender y que incluirá risas, alegrías, lágrimas y algunas discusiones, pero todas en compañía de nuestro ser más amado.

Este post lo escribo con gran alegría, pues quiero que sepan que comienzo un nuevo camino en mi vida. Uno que por años ví lejano, pero que siempre soñé recorrer. Y mientras el sonido de mis pies resuena a cada paso, la más sincera sonrisa se dibuja en mi rostro al sentir una mano que aprieta la mía con gran ternura y que viene acompañada de sus propio marchar, mientras miro el horizonte con la certeza de que mi hogar ahora viajará conmigo.

Stay in love!