De una ida y una vuelta

Hola y bienvenidos a esta nueva y reluciente entrada en el blog!

Lo cierto es que debía haber escrito este post el día de ayer, pero después de una intensa semana en la que impuse un nuevo récord personal de 42 horas sin dormir y en la que también completé mi segundo cortometraje animado, creo que se puede comprender la ligera demora.

El día de ayer, 23 de abril, cumplí un año de que llegué a Vancouver. En ese día emprendí un viaje que sabría que cambiaría mi vida, pero del que no sabría que tanto o como. Lo hice siguiendo un sueño largamente anhelado y sobre el cual siempre ha girado mi existencia. Llegué con muchas energías, con desbordante alegría y apoyado por los mejores deseos de todos cuanto amo. El inicio de la aventura no pudo ser mejor.

12 meses han pasado desde aquella vez que contemplé por primera vez la ciudad con la que tanto he soñado. Un año que ha pasado tanto lento como muy rápido, y en el cuál he vivido innumerables experiencias y conocido increíbles personajes.

Por el lado luminoso, he aprendido muchísimo sobre muchos temas, obviamente siendo la animación la principal beneficiada, y ahora, a una semana de mi graduación me siento listo para aprender mucho más ya trabajando en el medio. He conocido, como ya les comentaba, a un inmenso grupo de personas que se han transformado prácticamente en mi segunda familia pues nos veíamos prácticamente todos los días a todas horas, y de quienes me siento orgulloso de tener como compañeros y maestros, pues su calidad como personas y profesionales está más que comprobada.

El lado difícil ya lo he comentado mucho y en este párrafo más que volver a describirlo deseo disculparme con todos aquellos que me preguntaban sobre las novedades por acá y que obtenían como respuesta una larga e intensa descripción de lo complicado que era aguantar el ritmo de trabajo. De igual manera, aquellos que me tengan agragado a facebook o twitter podrán corroborar lo que digo. No me gusta ser quejumbroso, pero este tema lo he platicado con mis compañeros quienes me dicen que les pasaba igual, por la simple y sencilla razón de que NO TENÍAMOS OTRA NOVEDAD QUE REPORTAR, aqui nos la pasábamos todo el tiempo y esta era nuestra existencia. No es que no pudiera platicar de otra cosa pues los temas que domino siguen ahí, si no que la respuesta al "¿Que cuentas?" era siempre sobre la escuela. Una disculpa a quienes haya aburrido con este tema durante el año.

Ya estoy por graduarme, tras lo cual, y aqui viene el anuncio, viajaré a México por espacio de un mes y medio a descansar y dedicarle el tiempo que se merecen las personas a las que amo. Lo cierto es que ya necesito convivir con todos quienes alimentan mi espíritu con su sola presencia. Tras mi estancia, en julio regresaré a Vancouver a seguir haciendo lo que he hecho este último año, pero ahora buscaré que me paguen por ello (sé que lo valgo :P) Así que la aventrua jamás termina.

Hace un año, llegaba con muchísima energía, y ahora no puedo esperar para regresar ya con 2 cortometrajes, experiencia y otro tipo de energía al lado de mis seres queridos. Un ciclo hermoso que agradezco haber podido vivir y que he adorado en toda su extensión, tanto lo bonito como lo difícil. What a great journey!

Gracias por leer y recuerden:
Stay zombie!